Las oraciones adjetivas relativas son oraciones que funcionan como un adjetivo en otra oración más “grande”. Las usamos para identificar a un objeto, una persona o un lugar entre otros iguales. Por ejemplo en esta oración:
El chico que preguntó ayer por ti está en la puerta
hay una oración más pequeña, “que preguntó ayer por ti”, que funciona como un adjetivo para identificar a un determinado chico entre otros chicos. No sabemos cómo se llama este chico, ni qué hace en su vida, pero sí sabemos que él preguntó por una determinada persona ayer, entonces usamos esa acción para identificarlo.
En esta otra oración:
¿Puedes traerme el libro de cubierta azul que está encima de la mesa?
En esta oración, la adjetiva relativa es “que está encima de la mesa”. Es la característica que pensamos que nos sirve para identificar al libro que queremos entre otros libros.
Y en esta otra otra oración:
Ayer queríamos ir al restaurante donde siempre comemos, pero estaba cerrado.
usamos la adjetiva relativa “donde siempre comemos” para identificar a un determinado restaurante con respecto a otros.
ESTRUCTURA DE LA ADJETIVA RELATIVA
Como puedes ver en estos ejemplos, la adjetiva relativa comienza con un nexo*, es decir, con una palabra que la une a la oración más “grande” y está justo después del sustantivo que identifica:
El chico que preguntó ayer por ti está en la puerta
¿Puedes traerme el libro de cubierta azul que está sobre la mesa?
Ayer queríamos ir al restaurante donde siempre comemos, pero estaba cerrado.
En estas subordinadas adjetivas, los nexos son que y donde. Conforme vayamos viendo más ejemplos, iremos conociendo otros nexos y cuándo usar un nexo u otro.
* o con una preposición. Lo veremos más adelante.
Ejercicio
Para familiarizarnos con la estructura y el uso de las adjetivas relativas vamos a hacer un ejercicio. Mira la siguiente imagen y luego elige la opción correcta en cada oración por completar:
